Los incendios forestales están a la orden del día por todas partes.
Es común que al iniciar la primavera se registren los incendios, pero en esta ocasión aún no termina el invierno y ya están sucediendo. Esto ocurre por las escasas lluvias que se registraron durante el verano.
Por lo cual la yerba está más seca que en otras ocasiones, y con cualquier chispa que hacen los campesinos en las comunidades y cerros, se generan los incendios.
Pero también en la zona urbana, algo que no se había visto antes. Ejemplos de fuertes incendios en Valle de Santiago son los que ocurren en el rumbo de Chicámito y Changueo, otros en Cerro Blanco. Bomberos y Protección Civil hacen su mejor esfuerzo por controlar estos casos.