Agricultores de la zona no quieren que se abran las compuertas de las presas en el siguiente cultivo de primavera-verano, prefieren no sembrar porque están muy caros los insumos, con aumentos hasta de 100% en algunos productos.
El amoniaco anda entre los 20 mil 700 a 21 mil pesos la tonelada, cuando el año anterior estaba a 16 mil pesos, explican los productores tanto campesinos como agricultores.
Las sales cuestan entre 11 mil pesos, cuando andaba en 6 mil 500 pesos.
Las semillas suaves de Cortázar, Faisán, Cisne anda entre los 12 mil 500 la tonelada, aunado a que le van a subir 100 pesos más a la orden del agua para reunir fondos.
Con esto se van subiendo los costos, el los hombres del campo están muy animados, ya que tras las lluvias de este buen verano que pasó, hay agua suficiente en las presas, pero a la vez andan desanimados por los altos costos de los insumos.
«Es invertir mucho y ganar poco, ya que se vienen las heladas y ahí se va el patrimonio», explican en entrevista con Día7.
José Ramírez titular del Módulo de Riego agrega que «haciendo cuentas con lo que se va a gastar con esos precios tan altos, resulta que no van a salir ni los costos de producción, aunque al final la gente tendrá que seguir con sus cultivos».