El personal del SAT decomisó gran cantidad de ropa a los comerciantes que se rebelaron en el tianguis de Cuarcurío… Quedó en claro que es mejor respetar las reglas.
Para este lunes 25, de acuerdo a lo informado previamente, es el último día de cierre forzoso, y ya para el martes 26 estarán de nueva cuenta abiertos… y sin duda quejándose todos por esta grave situación.
Y una situación inmediata futura, porque seguramente habrá un costo político para los alcaldes y sus respectivos partidos, como en Uriangato el PRI y en Moroleón el PRD…. es lo que se afirma.
También la está llevando el Presidente Andrés Manuel López Obrador y su partido MORENA, pues a pesar de que se sabe que es una pandemia a resolver por cuestones de Salud, de todos modos muchas personas con puestecitos de ropa, los pobres de las colonias y otros sectores le están echando la culpa a ellos, lo cual se cobrarían en las elecciones del próximo 2021.
Esas son las mediciones que se tienen en cuanto a las actitudes políticas… Hoy por hoy están todos en silencio y respetando las reglas, más ahora en que ya vieron que si no cumplen, ¡les cae el SAT!
En el Hospital Regional puede haber condiciones para el contagio del Coronavirus, y esto en base a los datos que está generando diariamente la Secretaría de Salud sobre la situación de enfermos sospechos, enfermos declarados, fallecidos y contagiados comunitarios…
Por lo que se recomienda no asistir a menos que realmente se esté enfermo y que sea tratado por médicos y enfermeras.
Aunque dicen algunos de los pacientes que han estado ahí en esos días, que en el interior del Hospital todo se ve como normalmente ocurre, no hay nada de especial, salvo lavarse las manos y ponerse tapaboca. Cosa que no ha sido constatada, pero los versiones llegan.
Algunos comerciantes de ropa, al ver lo que venía con la pademia y consecuente cierre de tiendas, empezaron a fabricar tapabocas, y con eso cambiaron de giro.
La venta de éstas sí puede realizarse, por lo cual alcanzaron a mantenerse activos y vendiendo.
Otros vendedores recurrieron también a la venta fuera del local… desde sus casas ofrecieron las prendas, o desde sus cocheras, pero el local oficial lo mantienen cerrado.
En estos días también se dio el caso de unos autobuses que llegaron del norte del país y se estacionaban en el jardín.
Pronto llegaron los agentes de tránsito para impedir el estacionamiento y proceder a sacarlos del pueblo.
Sin embargo, menuda sorpresa tuvieron al ver que los autobuses llegaron sin personas, sin clientes. Vacíos.
¿A qué vinieron? Los clientes llamaron a sus textileros de aquí, y realizaron compras por teléfono. Los autobuses sólo llegaron a recibir la mercancía que fue solicitada desde allá.
Así de fácil. Hay que innovar.
Algo bueno debe salir después de todo esto, con todo y las penuras que están registrándose.
No hay de otra.