VALLE DE SANTIAGO.- «La historia se repite, cuando la agrupación Alianza Campesina provocó la invasión de la tierra que hoy forma la colonia La Loma, sus primeros pobladores no tenían agua y la tenían que traer de los pozos cercanos y empezaron a llevarla (ellos mismos) en tambos desde el centro», dice don Juan N. vecino del lugar.
Se hicieron gestiones, se hicieron marchas para exigir al Gobierno que les dotaran el servicio. Particulares crearon la venta de agua en pipas y camionetas, llevándola a todos los habitantes.
Así estuvieron durante muchos años… años de espera, hasta que llegó la red mediante un pozo perforado en la Unidad Deportiva, el cual empezó a dar servicio no sólo a los invasores, sino también a las colonias aledañas.
Hoy en día Antorcha Campesina exige también el servicio de agua… «que tengan paciencia, porque la solución llegará a su debido tiempo, con calma».