Mientras que otras parroquias que pertenecen a la Orden de los Agustinos, hubo cambios de curas en las diferentes parroquias, como fue el caso del Padre Maganda, que de la parroquia de Cuitzeo pasó a la de Moroleón, en lo que respecta a Uriangato no hubo cambios.
Bueno, en estos cuatro años sí hubo cambio en el Templo Parroquial del Sagrado Corazón, ya que como se sabe, falleció el señor cura, y fue nombrado otro sustituto.
Pero al Padre Manuel de la Parroquia de San Miguel Arcángel no lo removieron, lo que significa que habrá de estar ahí por otros cuatro años, hasta el año 2026.
Es algo que ha sido considerado positivo, puesto que el señor Cura Manuel ledio fuerza y vitalidad a los eventos relacionados con la fiesta de San Miguel Arcángel.
Ya que hasta antes de que él llegara, la cofradía pagana se estaba quedando con los aspectos que conforman la tradición original del pueblo católico.
Así las cosas, lo que ha venido sucediendo es que todos han tenido que aceptar que las cosas son como el mando agustino señala, y no como muchos católicos quisieran.
Hay señor cura para rato, y seguramente que habrán de verse más actividades. También bajo con este mismo curato coincide el inicio del gobierno de Anastacio «Tacho» Rosiles Pérez.
El cual ha sido un ferviente defensor de las tradiciones que se generan bajo la dirección de los padres agustinos.
De manera que tanto Manuel como Tacho están trabajando en la misma dirección, y esto ha hecho que se fortalezcan los enlaces de gobierno municipal con la Iglesia Católica para estos festejos que son de origen religioso, pero que trascienden hacia el gobierno. Ya que los años de la «separación» del Estado con la Iglesia se han acabado.
Ahora se trabaja en conjunto y esto ha sido en beneficio del Municipio en conjunto, tal como lo han explicado los conocedores y los profesionistas.
En nota aparte se habla de que el terreno de la Feria, o que se ocupa cuando hay Feria, no es del Municipio, ni del Gobierno, ni de algún particular, sino del ejido de San Miguel.
También es propiedad del mismo ejido el Terreno que ocupa el mercado «Dionisio Vallejo».
Igual el terreno que ocupa el Estadio de Beisbol, la unidad deportiva de por ahí, lo que ocupan las escuelas del mismo rumbo, y prácticamente toda la ciudad fue establecida en lotes que los sucesivos comisarios ejidales fueron vendiendo y tranzando en ventas aparantemente legales.
Pero ya nadie dice nada, porque así fue y siguió… y sigue.
Se espera que pronto haya una solución, porque hace años también el ejido demandó la entrega del terreno que se dice es de la Feria.
Un asunto que el Ayuntamiento puede resolver a tiempo. Y siempre y cuando haya el recurso.