Se debe de aprender en la vida que no todo es fácil en la vida.. Ya que muchas de las veces, y muchas personas aún siendo ya mayores, se les hace fácil todo… Y las personas que son así, bueno, pues nunca van a tener algo en su vida… Menos un hogar, casa o morada… También deben estar alertas aquellos que se
toman una pareja para vivir, o que incluso se casan con todas las de la ley… Al momento en que se están casando les dicen que «sean felices», y ellos mismos sienten que son felices, pues ya cuentan con alguien con quién vivir, y con quien hacer las labores sexuales correspondientes… Se dice que el amor es como un
sentimiento que radica en el corazón, pero en realidad tal vez radica en el sexo correspondiente de los dos…. A ver, Manuel, tú dime: se unen las parejas por vivir y convivir, o se unen por las ganas de realizar el acto íntimo sexual… Lo cual se practica al principio en forma constante, diario se juntan los cuerpos…. Pasan los meses, y ahora son tres veces a la semana… Pasa un año, y ahora son dos veces por semana… Y luego sólo
una vez a la semana, después cada 15 días y al final una vez por mes, si acaso… Y conforme menos relaciones setsuales tienen menos se sienten felices con esta compañera o compañero… Porque ya para entonces sólo están conviviendo…. Se acaba la pasión, se acaba el cariño, y entra lo que puede llamarse monotonía, o bien «el diario de vivir»…. Ya para entonces sólo se debe buscar el estar conviviendo sin
problemas, sin pleitos, y departir lo que se tiene o incluso lo que se requiere pero que no se tiene… Así fue la vida de Francisco Antonio, pasó por todo eso con su amada Arcelia… Ellos no se casaron, se «juntaron» nada más… Por cierto que ella ya había estado casada con un hombre desconocido, allá en un pueblo cercano, Huanímaro… Se regresó a su hogar familiar y tuvo problemas con sus padres… Ah, por cierto, se vino con sus dos niños que tuvo, desde luego con la primer pareja…. Así que al conocer a Francisco Antonio, y con tal de
que se hiciera su nuevo «amor» le dejó los niños a sus papás, para que no interfirieran… Así fue como se creó este nuevo matrimonio sin ley, sin papeles, es decir, se arrejuntaron o se inieron en pareja libre… Desde luego que en las primeras semanas se dieron con todo… en la cama… Y a veces en pleno mediodía y con el calorón, se metían a darse sin medida ni clemencia… Todo eso era chido para ellos… Pero como ya te digo, pasa el
tiempo y se deja de practicar el acto divino del amor…. Después de un año y medio ya no se metían a la cama para hacerse cositas, sino sólo para dormir… Sexo, de vez en cuando… Dicen que en un año uno se acaba el goloso placer del amor…. Tal vez algunos duren un poco más, pero hasta ahí… La vida entre esta pareja se hizo habitual, normal, cotidiana e incluso muchas veces, aburrida… Los pelitos comenzaron a incrementarse,
las demandas de atención crecieron pero no hubo respuestas, sólo desgano, impotencia y un mandarse a la chingada, que por esto, que por lo otro, que va, que viene, etc., etc… Motivos no faltaban… Pero aquella jovencita que era María Arcelia, al igual que todas, empezó a engordar, la panza se transformó en doble
llanta, porque así sucede, a menos de que haga mucho ejercicio… Yo no entiendo por qué a las mujeres se les forma «doble panza» o doble llanta… El caso es que también empezó a florearle el mal carácter, muchos pleitos con el marido, muchos reclamos, muchos mandados-a-la-chingada entre ellos… Pero lo peor fue el
nivel de violencia, pero no de parte de el hombre, sino de María Arcelia… Una vez le dio un empujón al estar discutiendo, y él no le contestó con otro, se hizo como que no pasaba nada… Al ver esto, en la siguiente discusión, ella le aventó la ropa en la cara y Francisco Antonio no vio nada malo en eso… Y a los tantos meses, ella se puso ebria, se enojaron, y en una de esas, le dio un cachetadón a Francisco… Nuevamente, él
tomó eso como si nada…. Nunca le dijeron el consejo sano de que si a la mujer le permites que se te suba al tobillo, al otro día ya la tienes en la cabeza… Así que ten cuidado… Pero Francisco pensó que «todo era una broma»… y por no parar a la mujer a tiempo, ella empezó a darle cachetadas, aventones hasta caer, sorpresivos golpes en la espalda sin aviso, maltratadas verbales, mentadas de madre, acusaciones falsas de
que andas con una pinche vieja, puto!…. Acusaciones de robo, de mal marido, flojo, no me das para el diario, te pido una pizza y no me la compras, te vas quién sabe a dónde y no me avisas…. ¡Pues aquí te chingas!… Ese día lo aventó y al caere, se le fue encima dándole de patadas…. El iba rodando y ella pegándole….. Pues
bien, tuvo qué pasar eso durante unas 10 veces para que por fin Francisco se desapareciera y se fue al otro lado de la ciudad… La dejó, y se esconde cuando la ve… Así pasa en la vida, mucho cuidado para ambos, él y ella, no se ofendan porque luego hay chingadazos… ¿O no?….