YURIRIA.- Un yurirense murió por los balazos que recibió tras haber sido levantado durante el camino al panteón, ya que iba con otras familias a un entierro.
Al ir caminando, de pronto se aparecieron unos sujetos con armas de fuego y lo obligaron a que se subiera, llevándoselo, y no se supo más de él por el momento.
Luego se supo que en Puruándiro los agentes de Tránsito detuvieron a una camioneta que iba a exceso de velocidad, y al detenerse le preguntaron al conductor que por qué iba tan rápido a lo que contestó que llevaba un hombre herido de bala rumbo al Hospital.
Ante eso, los agentes dieron acompañamiento a la camioneta y llegando al hospital, ya todo había sido inútil, pues murió. Se llamaba Artemio H. J., vecino de la comunidad de Aragón.