Y se cumplió con la elección…
Las cosas dieron un cambio, el voto se dispersó por la participación local de tres candidatos fuertes, PRI, PVEM e Independiente, así como la influencia que tuvo Andrés Manuel López Obrador con su partido MORENA.
Se había considerado que la pelea era entre el PRI y el PVEM, pero los resultados fueron que la pelea fue entre priístas, porque el candidato independiente deviene del PRI y su equipo también está conformado por priístas.
De modo que, aún a pesar de que el PRI se dividió en dos, Tacho Rosiles tuvo suficiente fuerza política electoral para quedar por encima de sus colegas priístas, y ganar en general con gran diferencia en todo el municipio.
El PRI asombró ahora ganando en casillas que antes eran seguras para el Verde, como algunas ubicadas en la Plan de Ayala y en Loma Bonita, colonias que en las anteriores se entregaron totalmente al Verde.
Y en el reparto de regidurías también se ven más priístas, como el regidor que quedó por el partido MORENA, Martín González Bedolla, que es sobrino del dos veces candidato a la Presidencia por el PRI, Miguel González.
Del Verde quedó como regidor un priísta de años, Carlos Serrato, que esdtuvo en el COMUDAJ al lado de Ramón Pérez García.
Desde luego que los regidores del Independiente, Dr. Roberto Vieyra, Sandra Díaz, Ricardo Martínez son priístas.
Ellos no han renunciado a su partido, según parece.
Ricardo Martínez formó parte del equipo del propio Tacho Rosiles, ya que estuvo en Desarrollo Rural, y fue Secretario del Ayuntamiento cuando el mismo Tacho pidió licencia para ser candidato a diputado local.
Se dice que Miguel González estuvo jugando al 3 de 3, porque lo mismo se le veía en las filas de la campaña del PRI, que en la de Juvenal, y tenía su gallo regidor en MORENA.
Hay que recordar que se molestó al no quedar en la planilla del PRI para regidores. Por lo tanto estuvo libe, y por si fuera poco estuvo en la campaña del candidato del PRI a la diputación, David Mercado, quien perdió ante el candidato panista, Gerardo X, de Salvatierra.
El equipo de campaña de Tacho fue el acertado, con muy buen desempeño; destacando la labor de logística de Jaime Ledesma.
Ahora le toca a Tacho Rosiles trabajar en condiciones más adversas que la otra vez, pues no hay priístas de diputados local y federal.
Y en el gobierno federal estará gente totalmente -o aparentemente- desconocida en las dependencias federales. En lo estatal sí encontrará amigos que le puedan dar el apoyo para el municipio.