JARAL DEL PROGRESO.- Pese a la «modernidad», en el municipio se están incrementando los casos de mujeres que han resultado lesionadas por abusivos maridos, que quieren imponerse «a la brava» o que no aceptan completamente su papel de padres y esposos.
Lo anterior queda evidente constantemente, mujeres lesionadas particularmente de la cara buscan ayuda de alguien, pues el que se lleven a sus agresores maridos a la cárcel, a petición o por denuncia, no ha significado que dejen la violencia intrafamiliar.
En las oficinas del Comité Directivo del PRD, asisten mujeres a buscar apoyo y consuelo ante las agresiones.
También hay estado en las oficinas policíacas, en la Presidencia, con los sacerdotes… en fin, con quien sea, para que les ayuden a parar la violencia que sufren no solamente las esposas, sino también los hijos.
Los casos son tan constantes, que ya está clasificado Jaral como un municipio en donde el machismo extremo sigue imperando.
Por lo que es necesario tomar medidas preventivas o de cualquier índole para parar estas acciones.