(LaRazon).- Por el clima de inseguridad y violencia que se vive en Guanajuato, la entidad recibió 2.9 millones de turistas menos entre enero y agosto de este año, respecto a los de 2018, y el descenso en la entrada de visitantes fue más visible en los municipios del corredor industrial: Salamanca, Irapuato y Celaya, los cuales también registran una caída en la derrama económica y la ocupación hotelera.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Turismo (Sectur) de la entidad que gobierna Diego Sinhue Rodríguez, en ocho meses del año, el número de visitantes en Salamanca cayó 31.75 por ciento, su derrama económica fue mermada en 31.13 por ciento, mientras que la ocupación hotelera bajó 33 por ciento. Irapuato registró 19.99 por ciento menos turistas, tuvo 16.5 por ciento menos derrama económica y la merma en ocupación hotelera fue de 18.07 por ciento. Mientras que en Celaya, el turismo bajó 15 por ciento y la derrama económica, seis.
Al respecto, Luis Ángel Camacho Vélez, presidente de la Asociación de Hoteleros de Salamanca, reconoció que “la ocupación ha bajado entre 30 o 40 por ciento respecto al año anterior. Tenemos afectaciones (…) pero no sabemos el alcance (de la delincuencia), porque no hemos tenido incidentes en los hoteles”.
“La ocupación ha bajado entre 30 o 40 por ciento respecto al año anterior. Tenemos afectaciones (…) pero no sabemos el alcance (de la delincuencia)”
Luis Ángel Camacho Vélez
En el mismo sentido, el director de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco-Servytur) de Guanajuato, Roberto Serrano Chirino, suscribió que los municipios de la entidad más afectados por violencia son los del sur.
“Lo que respecta a las noticias de inseguridad, de balaceras, generalmente se dan en las zonas de Salamanca, Celaya, y Cuerámaro”, aseveró en entrevista con La Razón. Sin embargo, descartó que hasta el momento algún turista se haya visto dañado o involucrado en algún tipo de incidente violento.
Detalló que en Celaya, debido a la violencia, los robos y las extorsiones, por cada diez locales comerciales, al menos uno ha cerrado en los últimos meses, lo que genera un impacto negativo en materia financiera.