León, Gto. Al interior del domicilio donde fueron detenidos los sujetos que atacaron a balazos al policía municipal, la policía ministerial encontró chalecos tácticos, cargadores de arma larga, tres armas cortas, credenciales de la Policía Ministerial que corresponderían a dos elementos en activo de la corporación.
Además al menos 5 playeras tipo polo en color azul y 2 en color gris con la leyenda bordada: “Policía Ministerial”, así como portagaffetes con la leyenda “PM”.
Un vídeo captado por la cámara de seguridad del Fraccionamiento Residencial Campo Viña-real muestra como fue la intromisión de sujetos armados a la caseta de vigilancia, mismos que se disfrazaron de Policías Ministeriales para someter a los guardias; momentos antes de que sus presuntos cómplices atacaran a balazos a un policía municipal de León.
Eran las 11:00 de la mañana, todo parecía tranquilo, un día como cualquier otro en la caseta de vigilancia que da acceso al Fraccionamiento Campo Viña-real, ubicado entre los Bulevares Delta y Olímpica, los dos vigilantes no esperaban lo que iba a pasar.
El reloj marcó las 11:04, según se puede constar en imágenes aportadas a Soy Barrio un automóvil Nissan Sentra en color blanco con vidrios polarizados y sin placas se detiene justo antes de la entrar al fraccionamiento, sobre las boyas de la calle Nandina; queda mal estacionado, de la puerta trasera derecha del automóvil desciende primero un sujeto, estatura media, delgado, vestía camisa de manga larga en color negro y un saco azul marino, pantalón de vestir en color beige, de su cuello colgaba una placa que lo identificaba como Policía Ministerial.
Segundos más tarde y detrás del primero, desciende un segundo sujeto, este vestía camisa de manga larga en color azul claro, pantalón de mezclilla en color negro y tenis negros con plataforma en color blanco, una gorra le cubría la cabeza, también llevaba colgada una placa de la Policía Ministerial.
Ambos sujetos entran a la caseta de vigilancia, se les observaba nerviosos, sobre todo al segundo.
A los 10 segundos de haber entrado a la caseta, pasa por afuera una patrulla de la policía municipal, no trae la torreta ni la sirena encendida, lo hace a baja velocidad, haciendo recorrido.
Unos segundos más tarde, desciende del automóvil un tercer sujeto, este vestía playera en color gris con letras en color negro, pantalón tipo cargo en color azul y tenis negros, se dirige al asiento del conductor; el segundo sujeto sale de la caseta, intercambian palabras; llevan ya poco menos de un minuto en la caseta; ya sometían a los vigilantes, los amagaban con un arma de fuego.
El tercer sujeto está aún más nervioso, voltea constantemente a ver a la calle, sus cómplices algo le dicen, los dos primeros y únicos que entraron a la caseta salen corriendo, algo les alertó: el primero titubea y se regresa a la caseta, ya el tercero entra, después todos salen corriendo y abordan el automóvil.
Siendo las 11:04 de la mañana, pero a una calle de la entrada del fraccionamiento, un elemento de la policía sigue a los tripulantes de una camioneta Murano en color blanco, la cual no traía placas y tenia los vidrios polarizados; dicho dato se contrapone a lo vertido por la Secretaría de Seguridad Pública en un comunicado posterior, donde señalaban que dicha patrulla, la 615 atendió el reporte de un asalto con violencia en proceso a 10 minutos de distancia (sin tráfico) a casi 7 kilómetros de recorrido.
El elemento identificado como Juan Pablo de Jesús Sánchez Avilés de 30 años de edad reporta vía radio que en la camioneta van cerca de tres personas del sexo masculino, pide apoyo a más compañeros para realizar una revisión precautoria.
El reloj marcó las 11:05 de la mañana, Juan Pablo estaba ya en la esquina de la calle Lilis y el Bulevar Delta, y seguía de cerca la camioneta Murano, pero algo pasó; los tripulantes de la camioneta hicieron alto total, no por respetar el derecho de paso de los demás automóviles por Delta, descendieron para agredir a balazos al policía que les pisaba los talones; el policía responde la agresión con dos disparos; momento que no fue dado a conocer por la policía municipal en su boletín.
Por el Bulevar Delta y saliendo de la estación de transferencia del Sistema Integrado de Transporte (SIT) se aproximaba un elemento de la agrupación de motociclistas de la policía municipal, primero iría a ayudar a su compañero a realizar la revisión, después cambió, a metros de distancia el elemento escuchó las detonaciones del arma; reportó vía radio a la cabina central de emergencias; estaban atacando a su compañero.
Juan Pablo bajó de la patrulla, dos disparos (cuando menos) hicieron blanco en el parabrisas de la unidad, dos más en el cofre, la agresión era directa, su vida estaba en riesgo; un disparo le rosó la cabeza, el segundo le atravesó la mano derecha.
El motopatrullero reportó las características de los agresores; precisamente siendo las 11:06 de la mañana, los sujetos que tripulaban la camioneta Murano y quienes hicieron la agresión armada, subían a un automóvil Sentra blanco, los mismos que estaban sometiendo a los vigilantes; dejaron abandonada la camioneta.
El oficial de policía lesionado pidió apoyo vía radio, la situación cambió, se reportaba lesionado; el oficial en moto seguía a distancia a los tripulantes del automóvil, sabía que al menos dos de ellos estaban armados; habían lesionado a su compañero.
Los minutos eran valiosos, Juan Pablo abordó de nuevo su patrulla, lesionado y apunto de desmayarse, logró conducir a toda velocidad al Hospital Médica Brisa, 3.6 kilómetros lo separaban de la atención médica, a las 11:10 de la mañana cruzó la puerta de urgencias; lo logró, una vez entrando fue atendido, la lesión en su cabeza y el sangrado de sus manos era visible; se dolía, nunca desistió, reportó por radio dónde estaba, sus compañeros hasta ese momento no sabían.
El operativo apenas comenzaba, los tripulantes del Sentra aceleraron, pasaron todo el Bulevar Delta, llegaron a la esquina con el Bulevar Juan Alonso de Torres, dieron vuelta hacía la izquierda enfilándose hacía Morelos, ahí se le perdieron de vista momentaneamente al moto patrullero.
A las 11:15 de la mañana otro elemento que estaba en la caseta de vigilancia de la colonia Los Naranjos los tuvo a la vista, pasaron a toda velocidad por el Bulevar Saltillo en dirección a la colonia Fracciones de Mesa de Medina.
El operativo se concentró en la zona, militares, verdaderos ministeriales, policías municipales peinaban la zona, luego un policía avisó a sus compañeros por radio, habían localizado a los agresores.
A las 11:20 de la mañana la policía cerró la calle Flor de Azalea de la colonia Fracciones de Mesa Medina, en el número 134 se habrían refugiado los presuntos agresores, ahí estaba el automóvil Sentra blanco; incluso, se dijo, tenía las puertas abiertas. El boletín con la versión oficial mencionó que la detención se realizó en la colonia Praderas de Agua Azul, la cual está sobre el Bulevar Delta, a escasos metros dónde fue abandonada la camioneta Murano.
Algunas voces narraron a Soy Barrio que desde la casa los sujetos le apuntaban a la policía municipal con armas, todo fue un escándalo en la calle, los vecinos temían se desatara la balacera, pocos sabían que los policías jamás le perdieron la pista a los agresores de su compañero, era cuestión de minutos.
Ahí, ya cerca de las 11:30 de la mañana, fueron detenidos (y no en Praderas de Agua Azul) quienes fueron identificados por la policía municipal como: Eduardo Guadalupe de 26 años de edad, Raúl de Jesús de 26 años de edad y Misael de 24 años de edad.
Sólo uno de los detenidos, vestía al momento de la detención con la misma playera color gris con letras negras, solo que no tenía pantalones tipo cargo usaba pantalón de mezclilla en color azul; los demás que usaban ropa de vestir ya no tenían puesta la misma indumentaria.
Los tres detenidos, la camioneta y el automóvil fueron puestos a disposición del Ministerio público.