YURIRIA.- Los habitantes de las comunidades son quienes menos quieren aceptar o seguir las normas de prevención del contagido del temible
Coronavirus o COVID19 que, dicen las autoridades de Salud, está tomando más fuerza, sobre todo a partir de que se dictaminó el semáforto amarillo.
Con el cual mucha gente consideró que ya no era tan necesario el
cubrebocas, lavarse las manos, la sana distancia, el uso del gel.
En las comunidades las fiestas familiares siguen llevándose a cabo con todos los honores correspondientes… gran cantidad de gente, aglomeraciones en salones y corrales de casas.
Incluso le cantan al Coronavirus con la estrofa de «La Vida no Vale Nada».
En la ciudad están cancelados los permisos de apertura de salones de fiestas, pero los ubicados en Cerano, Casacuarán y otros lugares, no.
Así que a fiesta no tiene límites.