La familia de José Daniel, de 26 años, estaban hartas de los constantes problemas que tenían con él, debido a su adicción a la droga. Cada rato llegaba «bien pasado» y colérico.
Por lo cual decidieron meterlo a un anexo de AA para que dejara ese vicio y se reintegrara a las actividades libres de alcohol y droga.
Lo llevaron al centro de rehabilitación denominado «La Llave de la Buena Voluntad», ahí quedó internado, fue recibido «de buena voluntad» por los internos y padrinos.
Sin embargo, horas después de haberlo dejado ahí, por la tarde recibieron el aviso de que «había muerto a consecuencia de su adicción».
Lo bañaron con agua fría, como habitualmente hacen cuando el anexado se muestra rebelde. Y esto pese a que el cuerpo del recién llegado sigue caliente por el consumo de enervantes.
Cuando a los familiares que el joven había muerto enseguida de ingresarlo, se quedaron muy preocupados, por lo que presentaron una denuncia ante el Ministerio Público porque consideraron que no tenía por qué haberse muerto José Daniel.
Esto ocurrió el 20 de diciembre de 2023, en el centro de rehabilitación “La llave de la buena voluntad”, ubicado en la calle Cuauhtémoc de la colonia Anáhuac, de Silao.
Pasaron los meses, y después de las investigaciones, el Ministerio Públlico determinó que José Daniel había sido víctima de golpes. Así lo mostraba la autopsia realizada.
El Ministerio Público investigó los hechos y dio a conocer que José Daniel, fue golpeado en el baño por Luz Eduardo, alias “El Tico Rap”, «padrino» de seguridad del anexo.