Por: José Luis Camacho Acevedo.-
La siguiente es la versión que dieron al redactor de estas notas habitantes de una comunidad de las cercanías con Santa Rosa de Lima:
El caserío conocido en las inmediaciones de Villagrán como Santa Rosa de Lima, en el centro del estado de Guanajuato, es el asiento de las actividades logísticas del primer huachicolero de México, Juan Antonio Yépez, alias El Marro.
El pasado martes un grupo de ¡cuatro agentes ministeriales!, pertenecientes a la Fiscalía del Estado de Guanajuato, llegaron a una bodega ubicada en Santa Rosa de Lima donde a través del GPS localizaron la señal de una camioneta reportada como robada.
Al llegar a la bodega mencionada interrogaron al encargado de la misma sobre el paradero de la camioneta robada.
El encargado, con el pretexto de ir por el inventario de vehículos que tenían, aprovechó para avisar nada menos que al Marro, que casualmente se encontraba en el lugar, la presencia de los policías en las puertas de la bodega.
El criminal de inmediato huyó por la puerta trasera de la bodega y desde su vehículo empezó a dar órdenes a sus gentes para que se movilizaran y cerraran todos los accesos a Celaya.
En menos de dos horas las gentes del Marro habían paralizado a casi medio país.
Afectaron la principal vía que comunica el occidente con la capital de la república y lo mismo la carretera 57 que corre de San Luis Potosí a Querétaro.
Las gentes de El Marro reaccionaron, y demostraron una capacidad de respuesta mayor a la de los integrantes del cartel de Sinaloa cuando en octubre del año pasado liberaron a Ovidio Guzmán, el hijo del Chapo, que había sido detenido en Culiacán.
El Marro no esperó a corroborar si eran solo cuatro agentes en busca de una camioneta robada lo que en realidad buscaban.
El delincuente actuó en prevención de que se pudiera estar gestando un macro operativo para capturarlo y que detrás de los agentes estarían elementos del Ejército y de la Guardia Nacional.
Mientras en Guanajuato los reportes del gobierno estatal siguieron, como siempre que ocurre un evento relacionado con el crimen organizado, fueron insistentemente confusos y difusos.
El mandatario Diego Sinhué Rodríguez volvió a ser exhibido como una autoridad rebasada por el crimen organizado, concretamente por el Cártel Santa Rosa de Lima liderado por El Marro.
En su conferencia mañanera, pese a las evidencias de que El Marro había paralizado gran parte del territorio nacional en menos de tres horas, el presidente López Obrador dijo que “había sido un acto propagandístico de los criminales”.
El Marro la verdad que no ocupa hacerse propaganda para demostrar que es el que tiene al gobierno de Guanajuato en calidad de ser un estado fallido.
Lo que dijo el presidente en realidad fue una salida fácil para dar respuesta a la pregunta sobre el evento del que, otra vez, se observó que no tenía información ni completa ni confiable.
Para AMLO paralizar a miles de transportistas fue un acto circense destinado a lograr notoriedad.
Desgraciadamente, esta vez el que tenía otros datos era Antonio Yépez, El Marro.