En tan difícil situación están las clínicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), que ya no les alcanza ni para la adquisición de materiales y equipo para que sigan trabajando tanto médicos como enfermeras.
Personal del interior explica que tanto cubrebocas como batas son reutilizadas dándoles simplemente una lavadita, que no sirve ni para quitar restos de sangre y otros líquidos.
Estas batas y cubrebocas médicas generalmente son de un sólo uso, y las tiran al cesto al terminar el trabajo.
Pero ahora al parecer no hay dinero porque aún siendo de un sólo uso, las lavan como pueden y se los vuelven a poner.
Esto con el riesgo de que se puedan contagiar o contaminar con esos materiales lavados.
Es de lo que dan cuenta tanto médicos como enfermeras del Seguro Social.