¿Qué pasa en la cabeza o en los sentimientos de una mujer, cuando no suceden las cosas como comúnmente ocurre en las relaciones con el hombre, o los hombres?… María Trinidad fue una joven que fue una muchacha sana, muy activa y proactiva con los novios…
Se dice que tuvo como 5, antes de casarse con su esposo, y con el cual ya tiene 15 años de vida matrimonial… Todo muy bien, para ella porque este esposo, le salió trabajador, aunque un poco borracho en exceso durante ciertas temporadas en que agarraba la jarra la semana entera…
Era albañil de oficio, y pues realmente no había mucho que perder con los patrones, salvo regañadas que le daban… Pero con todo y eso era -y es- cumplidor con sus deberes hacia la esposa y la familia en genera, con dos chiquillos… A pesar de que cuando ya tenían 10 años, ella se mostraba inquieta, demostrando una sensación de que no le gustaba mucho vivir y convivir con su marido…
Pero no se sabe qué anhelaba… Tenía por costumbre usar una blusa con los botones abiertos en la parte de arriba, de tal manera que se le miraban robustos senos, y ella caminaba orgullosa, seguramente esperando llamar la atención a los hombres, como es lógico y normal, pero con ese escote, vaya que la vista era hasta forzada…
Muchos amigos del barrio decían que si ella traía esos escotes mostrando sus cántaros sabrosones, era porque ella buscaba, además de mostrar o presumir, también buscaba algún galán que le hiciera caso para enrolarese con él, y con eso iniciar una aventura amorosa y sexual… La verdad es que nunca se le supo si había andado con un hombre o con unos dos que tres… Pero siempre andaba así….
Ya con los pequeños nacidos y un tanto crecidos, un día resultó que, de buenas a primeras, ella se fue de la casa, abandonando a los hijos, encargados con una tía, e irse con un tipo de sombrero… Este se la llevó hacia su casa allá en el otro extremo de la ciudad, en donde le ofreció casa, seguramente que vestido, y sí, sustento…
Ella se miraba admirada de ese hombre, el cual en realidad no tenía ningún dote, digamos alto, güero, guapo, de mirada serena… No…. Era simplemente un hombre común y tal vez no tan corriente… Pero la mujer dejó al marido, dejó sus hijos, dejó la casa del marido, por irse con este otro hombre que no tiene esposa, pues es divorciado, aunque sí tiene un buen empleo… todo mundo se dio cuenta de lo que había hecho, de que dejó a la familia entera para irse con un aventurero, que ni hijos tenía…
Así que el asombro fue generalizado… Ante esta situación, su marido investigó, supo en dónde estaba, y fue por ella… De entrada no le dijo nada de esas pinches preguntas uleras que usan las esposas: «¿Con quién andas? ¿que hiciste, por qué te fuiste? ¡No te da vergüenza con tus hijos!», etc., etc…
No, este hombre llegó a la casa del otro, tocó la puerta salió ella y simplemente le dijo: «Vengo por tí, ya vámonos a la casa»… La mujer se quedó sorprendida de que no le reclamara nada, sino sólo que ya se venga a su casa… De entrada ella dijo que no podía, que le daba vergüenza, tanto con él como por la gente del barrio… A lo cual le contestó que «No importa lo que digan, ya vente a la casa, tus hijos te extrañan, preguntan por tí, ya van 5 días que se te saliste y yo esperaba que te regresaras, y nada. Así que toma tus cosas y vámonos porque los niños te esperan y yo también»… ¡Ah, qué buen marido, además de noble!… Demasiado…
El la tomó de la mano y la jaló, para que se viniera de regreso… Así lo tuvo qué hacer, se dice que por amor a los niños…Ah, sí, pero si tuviera amor a los niños no se hubiera salido de su casa… La mujer regresó, los niños se pusieron contentos, menor el mayor, quien se fue a vivir hace días a la casa de su abuelito, en donde de alguna forma se esconde, y expresa que no regresará a su casa de su papá, sino hasta que su madre ya no ande por ahí, dándolas (las nachas)… Así que no tuvo más remedio que regresar, y estar con los demás….
Los vecinos del barrio se preguntan que cómo es posible que una mujer deje a su hogar, su familia, y su bien portado esposo, que le da su dinero del chivo, además de que llega con una sandía, unos dulces, pan o leche, independientemente del diario.. ¿Qué pasará en ella si tiene todo como esposa y como madre, tiene buen marido, buena gente y noble? ¿por qué esa actitud de irse con un pelao con el cual no tiene futuro, puesto que el wey tiene un trabajillo chafa, al final de cuentas gana menos que su marido?….
Esa es la incógnita, ¿por qué irse con otro en medio de esas buenas situaciones que tiene?… Unas señoras dicen que seguramente el amante «lo tiene más bueno», y que por eso se va…
Bueno, sí, supongamos que «lo tiene bien bueno», ¿pero a poco una mujer nada más va vivir de las acostadas?…. Se requiere dinero para vivir más o menos bien… ¿qué es lo que le atrajo, qué dio?… bueno, tal vez la única respuesta es de que ella ha de ser bien golosa, por eso anda con la blusa abierta, tal vez quiere probar el 1, el 2 y el..