El que por falta de lluvias no se estén dando sus cultivos en tierras de temporal, provoca que cuando menos, los productores agrícolas de escasos recursos, se vean en la alternativa de sembrar garbanzo, para luego ofrecerlo en la ciudad y en las carreteras.
Es el caso de Manuel y Raúl, quienes logran llevar el sustento a sus familias.
Hoy compran y venden garbanzo en la orilla de la carretera federal, Yuriria-Valle de Santiago, inmediaciones de la comunidad Parangarico.
Son originarios de la comunidad, San Miguel,
Dijeron que, la situación en el campo cada día es más difícil y más cuando no hay lluvias.
“Tenemos nuestro terrenito en el cerro, es temporal y en lugar de ganar algo con el maíz que sembramos, perdimos porque no se dio, no llovió como se esperaba y ahora hasta con deuda vivimos”, explicaron. (Correo)