Verduras gigantes del Valle de Santiago, otra de las historias sorprendentes de este México mágico. Un país surrealista lleno de increíbles historias que parecen falsas pero que solo alimentan la imaginación de una población difícil de sorprender.
Viajaremos en el tiempo en esta increíble pero cierta noticia. Esto que estoy a punto de contarles, sucedió hace más de 50 años. Un evento misterioso y con pocas explicaciones, que a la fecha ha quedado un poco olvidado para la mayoría de los mexicanos que lo presenciaron y que los pobladores de aquella región, aún recuerdan fervientemente.
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Era el México de los años 70´s, un país en desarrollo con un gran futuro por delante. México siempre se ha distinguido por ser un sitio privilegiado por su geografía. Cientos de lugares de este país se destacan por sus espectaculares paisajes y sorprendentes comunidades.
En aquel entonces un pequeño poblado resultó ser la noticia por hechos insólitos. Valle de Santiago en Guanajuato, era un poblado con pocos habitantes. Pocas personas conocían de este, inclusive en el mismo estado.
Aunado a esto, Valle de Santiago fue también conocido por la aparición de verduras gigantes. Productos con tamaños descomunales comenzaron a ser vistos en la zona.
El también conocido como el “Valle de las Luminarias”, se popularizó cuando coles de 43 kilos y acelgas de casi 2 metros invadieron sus campos. Parece un relato de fantasía, sin embargo, todo fue completamente real.
Don Oscar Arredondo, fotógrafo, fue el primero en dar a conocer este fenómeno. Un campesino le comentó sobre esto gigantescos productos, por lo que asistió a conocer el sembradío. De aquí tomaría las fotos que se harían famosas. La noticia voló, atrajo a turistas y grandes expertos, especialmente científicos que no podían creer lo que veían.
Esta gigantesca cosecha se hizo muy popular, se dieron a conocer que dentro de los productos que tenían era: cebolla, maíz, col, coliflor, rábano, betabel, lechuga y zanahoria.
Según comentarios de Don Oscar Arredondo para un programa con Telepaisa, estos productos eran creados a partir de nuevas técnicas agrícolas (tratamiento cósmico-astrológico). De acuerdo con Arredondo, las semillas duplicaban su tamaño y al sembrarlas daban estas verduras gigantes.